Descripción

Las entrevistas —alrededor de 55— fueron realizadas entre el 6 y el 25 de abril de 2022. La encuesta fue levantada en modalidad online entre el 18 y el 29 de abril de 2022, recibiendo 583 respuestas válidas.

La mayor parte de las empresas reporta que su desempeño no ha mostrado grandes variaciones respecto de inicios de año. Esto sucede en un contexto donde la demanda se ha mantenido más bien estable, a pesar de una leve moderación, y las presiones de costos siguen elevadas. Si bien los precios de venta han continuado aumentando, la percepción sobre los márgenes de ganancia ha seguido deteriorándose a causa del aumento de los costos. El porcentaje de empresas que planea invertir este año sube levemente respecto de lo informado en octubre del año pasado. La falta de seguridad sobre la concreción de estos proyectos es similar a la que se observaba a esta misma altura de año para la inversión de 2021, momento en que la evolución de la pandemia era el principal factor de preocupación de las empresas. De las entrevistas, se desprende que la incertidumbre político-legislativa se ha vuelto el principal factor de dudas para que las empresas concreten sus inversiones. Las expectativas suponen una persistencia en las presiones de costos por los efectos que pueda tener la invasión a Ucrania y el confinamiento en China, a la vez que una disminución en la actividad y la demanda en el segundo semestre de este año, la que se acentuaría especialmente durante 2023. Este escenario tiene como consecuencia que el aumento esperado en los precios de venta será de menor intensidad que en los últimos meses. La gran mayoría de las empresas espera que durante los próximos doce meses la inflación se encuentre muy por encima de lo que consideran normal. Aunque su efecto en el desempeño de las empresas, hasta el momento, ha sido poco significativo, existe una preocupación general por el impacto en las decisiones de consumo de los hogares y el posible efecto de esto sobre el desempeño futuro de sus negocios.