2.3.3 Minería
2.3.3.1 Caracterización de la agrupación
La actividad minera comprende la extracción de minerales en estado sólido, líquido o gaseoso, así como toda acción que los acondicione para su comercialización, como trituración, desmenuzamiento, limpieza, secado, selección, aglomeración y concentración; adicionalmente, se incluyen los procesos de fundición y refinación de cobre42.
Se incluye además la producción de servicios de exploración y prospección minera, los cuales son efectuados con el propósito de identificar nuevos yacimientos. Estos gastos, según las recomendaciones del SCN, se consideran como formación bruta de capital fijo (FBCF), por cuanto la exploración minera crea un stock de conocimientos respecto de las reservas mineras, el cual puede utilizarse en las actividades de producción futuras.
La actividad predominante dentro de la agrupación es la minería del cobre, donde Chile destaca como uno de los mayores productores del mundo. Los principales productos de esta actividad son el cobre refinado en forma de cátodos y el concentrado de cobre. También se obtienen molibdeno, oro, plata y ácido sulfúrico como productos secundarios.
Además de la minería del cobre, la actividad minera del país incluye la extracción de minerales de origen fósil (carbón, petróleo crudo y gas natural), metales preciosos (oro y plata), hierro, plomo, zinc y diversos minerales no metálicos, tales como piedras, arenas y arcillas; así como sales con alto contenido de yodo, nitratos, litio y sodio. Cabe mencionar que los procesos de refinación y mezclas químicas de las sales ricas en yodo, nitratos y potasio, se excluyen de la minería para medirlos en la industria manufacturera.
En cuanto a su organización, la industria minera se encuentra altamente concentrada. En el caso de la minería del cobre, cinco empresas generan en conjunto alrededor de un 70% de la producción total de la actividad. Niveles similares de concentración se observan en la producción de hierro, metales preciosos, hidrocarburos y los principales minerales no metálicos.
Con la excepción de los minerales de origen fósil (carbón, petróleo y gas natural), el destino predominante de la producción minera es el mercado externo; sólo un bajo porcentaje se destina a la demanda interna.
La agrupación representó un 9,6% del PIB en el año 2018. La participación de las actividades que la componen se muestra en el gráfico 2.3.
GRÁFICO 2.3 Participación de las actividades en el VA de la agrupación Minería

2.3.3.2 Fuentes de información
La principal fuente estadística para estimar la producción y las estructuras de costos de cada actividad minera es la Encuesta Nacional Anual de Minería (ENAM), levantada por el INE. Adicionalmente, se utiliza información de anuarios estadísticos y datos de comercio exterior, entre otros. Para la estimación de coyuntura se utiliza, principalmente, información de producción de las empresas de estas actividades. La tabla 2.3 resume las fuentes de información utilizadas en la estimación de la agrupación Minería.
2.3.3.3 Metodología de compilación
Cuentas de producción anual
La estimación de la cuenta de producción anual a precios corrientes se realiza mediante el método de actividad, utilizando información de empresas proveniente de la ENAM y registros de comercio exterior del Servicio Nacional de Aduanas. En las actividades cobre; oro y plata; piedras, arenas y arcillas; y carbón se complementa la información de la encuesta con información de pequeños productores.
Para la medición en términos de volumen se utiliza el método de doble deflación para el VA, extrapolando por cantidades la producción y deflactando el CI.
TABLA 2.3 Fuentes de información de la agrupación Minería

Producción
Para estimar la producción se elabora un balance físico a partir de las variables producción, compras, ventas y variación del nivel de inventarios por producto y empresa, contenidas principalmente en la ENAM y, en el caso de los hidrocarburos, en la información provista directamente por las empresas. Las cifras de producción y exportaciones se complementan con información contenida en los anuarios estadísticos de los organismos sectoriales, registros aduaneros y las estadísticas mensuales de inventarios mineros levantada por el INE.
El nivel valorado de las exportaciones proviene directamente de los registros de aduana, y dado que también se cuenta con información de cantidades exportadas en estos registros, se establece un precio implícito para cada mineral, validado con los precios internacionales de cada producto. La producción destinada al mercado interno se estima a partir del balance físico y los precios de exportación determinados, y la variación de existencias, en base a estadísticas de inventarios de minería del INE.
Consumo intermedio
Los datos de CI se obtienen de la ENAM y se complementan con información de estados financieros y con antecedentes de insumos relevantes contenidos en los anuarios sectoriales. Entre estos insumos relevantes se encuentra el concentrado de cobre (autoinsumo), que forma parte del balance físico determinado en la producción. Adicionalmente, se utiliza la factura electrónica para contrastar y complementar la estructura de insumos.
Valor agregado
El componente de remuneraciones se obtiene principalmente de la ENAM y se complementa con informes financieros y antecedentes tributarios. Por su parte, los impuestos y subvenciones se determinan utilizando información de recaudación tributaria. Finalmente, el excedente bruto de explotación se obtiene de manera residual entre la producción, el CI y los componentes del VA mencionados y se contrasta con estados financieros.
Medición coyuntural
La medición coyuntural de la Minería se basa en la extrapolación del VA del año anterior, a partir de indicadores de producción (producción física) usando el método de indicador único.
La estimación de todas las actividades mineras se realiza con periodicidad mensual, dada la disponibilidad y oportunidad de la información de producción efectiva, obtenida directamente desde las empresas públicas y privadas, complementada con información recopilada por el INE, la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) y Sernageomin.
Un aspecto relevante en la compilación del indicador de coyuntura de la minería del cobre es el concepto de producción final, lo que implica que las transferencias de productos en proceso entre establecimientos se consolidan a nivel de empresa, con el objeto de medir la producción efectiva disponible para comercialización. Esto adquiere especial importancia dado que dichas transferencias son parte de un proceso productivo que se extiende más allá del período de medición.
Recuadro 2.2
Cobertura de la industria minera del cobre en Chile
En las cuentas nacionales de Chile, la actividad minera del cobre comprende desde la extracción del mineral hasta su refinación, independiente del proceso metalúrgico empleado para ello. El criterio aplicado para tal definición se basa en el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (SCIAN*), que difiere de los lineamientos que definen la industria minera de acuerdo a la Clasificación Industrial Internacional Uniforme (CIIU). Según esta última, parte de la actividad minera medida por el SCIAN corresponde a la industria manufacturera.
Para extraer el cobre en su estado puro, se distinguen dos procesos metalúrgicos dependiendo de si el mineral es del tipo oxidado o sulfurado. El mineral oxidado, que se encuentra en zonas más cercanas a la superficie y presenta, por tanto, mayor cantidad de oxígeno, sigue un proceso de hidrometalurgia, que incluye las etapas de lixiviación del mineral, extracción por solventes y electroobtención, dando origen al cátodo de cobre electroobtenido (cátodo EW). El mineral sulfurado en tanto, que se encuentra a mayor profundidad y contiene mayor cantidad de azufre, sigue un proceso de pirometalurgia, que incluye las etapas de flotación, fundición y refinación electrolítica, generando como producto final el cátodo de cobre electrorrefinado (cátodo ER), y como productos intermedios el concentrado de cobre (tras la etapa de flotación), el cobre blíster y los ánodos de cobre (tras la etapa de fundición). A diferencia del proceso de pirometalurgia, el hidrometalúrgico es continuo, por lo que no se derivan productos intermedios comercializables.
Según el SCIAN, el proceso completo de hidrometalurgia se clasifica como actividad minera, en tanto que el proceso pirometalúrgico se considera minero sólo hasta la etapa de flotación, clasificando el resto en la actividad de la industria manufacturera. En contraste, de acuerdo con la CIIU la hidrometalurgia y la pirometalurgia son procesos mineros sólo hasta las etapas de lixiviación y flotación, respectivamente, siendo procesos industriales las etapas posteriores. Sin embargo, este criterio no es aplicable en la práctica, ya que, si bien en la producción pirometalúrgica es posible distinguir las estructuras de costos correspondientes a cada etapa del proceso (de una planta concentradora, una fundición y una refinería), no lo es en el caso de la producción hidrometalúrgica, puesto que, al ser un proceso continuo, dichas estructuras se encuentran integradas.
La adopción del SCIAN para medir la minería del cobre en Chile obedece a una mayor similitud con los procesos metalúrgicos realizados en Estados Unidos y, en menor medida, México, países que concentran, junto a Chile, prácticamente dos terceras partes de la producción mundial de cátodos EW.
*/ Ver United States Census Bureau (2017).